Redondo es el Sol como un girasol. Redonda, la Luna como aceituna.
Redondo, Saturno espera su turno con muchos anillos para sus dedillos.
Redondo, Plutón y bobalicón. Todos, de puntillas bailan seguidillas.
La Tierra, redonda haciendo su ronda recita algún verso por el universo.
La Tierra, poeta, es mi gran planeta.
A mi hermano Rafa como es un bebé le traerán los Reyes tres chupes de menta y dos de café.
A mi mamá guapa que siempre está fuera, un coche pequeño con ruedas cuadradas, hecho de madera.
A mi papá grande, como es director, ropa deportiva, un mecano nuevo y algún flotador.
Porque si son Magos tendrán que saber:
Que yo estoy muy solo, que mamá, de viaje, que el chupe está roto, y papá cansado de ponerse el traje.
Sólo por el día sabe la cigüeña que es extremeña.
Sueña por la noche que es una reina dueña de los ríos.
Ríe la cigüeña.
Y sueña que baila, que danza en el aire, que cruza los bosques, que surca los mares, que entra en la selva.
Se va la cigüeña.
Y sube más alto buscando a su abuelo que está por el cielo.
Él siempre la espera. Sentado, ya ciego, luce un lucero.
En los firmamentos habita un anciano, del cielo decano, contador de cuentos.
El cigüeño, dueño de mucha memoria, juega con su nieta. Hace una cometa, recuerda una historia
y cuenta risueño las danzas de fábula que ve en su sueño.
Esta historia es de un pulpo que empeñado en trabajar creía que era fácil hacer labores de hogar.
Empezó por lo sencillo:
primero hizo ganchillo y, con tantas filigranas, se lió con el ovillo.
Luego pensó cocinar pero no tenía salero, así es que decidió meterse a camarero.
¡Caracoles con frijoles!
No quedó ni un solo plato, el pulpito manirroto resultó mal candidato.
Lloraba desesperado preguntándose al día mucho más de veinte veces: “¿para qué yo serviría?”
De pronto se iluminó…
Se puso a bailar flamenco y tocando castañuelas se volvió todo un portento.
Tan ruidoso y tan chico. ¡Invasión! Picotazo del mosquito. ¡Qué borrico!
Federico, cierra el pico. ¡Insensato! Que te doy en el hocico un tortazo.
No pongas cara de mico. ¡Abusón! Que tú eres un mosquito. ¡Picarón!
Se plantea el semestre de cada curso escolar. Este plan es del trimestre:
Los lunes, para Sociales; y dos clases de modales.
Durante el martes, Inglés; el ABC de los chinos; y canciones en francés.
El miércoles, un montón de reglas de educación.
Algunos jueves, Lenguaje; si no hacen ogrerías, también habrá patinaje.
Y los viernes, a debate, ¡que no es un disparate!
¡Pues sí que tienen guasa!
Cien pies con cien zapatos y todos con sus lazos andando a la vez.
Se hacen unos líos de muy señores míos.
Y van en procesión, unos detrás de otros molando mogollón.
¿Tú has visto un ciempiés andando del revés?
Pues si tiene osadía… ¡Jesús, José y María!
Página en construcción. Disculpen las molestias.